Por Lizbeth Diaz UNIÓN DE TULA, México (Reuters) - El huracán Patricia parecía haber causado menos daños de los que se temía en la costa del Pacífico mexicano, pero poco se sabía de zonas aisladas salpicadas de residencias exclusivas y pueblos de pescadores donde el ciclón descargó fortísimos vientos y torrenciales lluvias. Miles de habitantes y turistas huyeron de la tormenta, una de las más poderosas en la historia, buscando refugio en albergues. No había informes de muertes ni grandes afectaciones en centros turísticos como Puerto Vallarta y Manzanillo. ...